El autor de las amenazas de bomba en el Perrando sería un homicida preso en la U7
Se trataría de un preso de la U7 que cumple una condena por el homicidio de su padre en 2013. El año pasado fue quien denunció a policías de haberlo abusado, pero se comprobó que dicho abuso no ocurrió.
Según información trascendida, el autor de los llamados de amenaza de bomba en el hospital Perrando estaría identificado.
Se trataría de Diego Armando Ibáñez, un preso alojado actualmente en la U7 de Resistencia, que cumple una condena por el homicidio de su padre en el año 2013.
El miércoles y viernes de la semana pasada, dos llamados alertaron al 911 sobre la supuesta presencia de artefactos explosivos en el hospital. Por lo que se desplegaron amplios operativos en el nosocomio a fin de resguardar la seguridad de las personas. Ambas amenazas resultaron ser falsas.
El Departamento Investigaciones comenzó las tareas investigativas a partir de los sucesos, logrando identificar que podría tratarse de un abonado público que corresponde a la empresa Telecom.
Así, se ubicó el lugar que sería la Prisión Federal Norte U7 y tras la debida autorización del Director del Servicio Penitenciario, se informó que el número de abonado pertenece al sistema de líneas telefónicas instaladas en ese establecimiento de reclusión.
La prensa policial, informó que el interno sindicado como autor de los llamados, al momento de realizar los mismos, se encontraba alojado en el Sector de Asistencia Médica de la Sala.
Las actuaciones de acuerdo a lo ordenado por el Fiscal en turno fueron derivadas a la Comisaria Primera Resistencia quien lleva adelante la causa. Y que el interno involucrado sea notificado de la detención en la causa que actualmente se están llevando a cabo.
Quién es Diego Armando Ibáñez
El preso Diego Ibáñez, fue protagonista de varios hechos que tuvieron repercusión en los medios. Uno de ellos, el más grave, fue cuando denunció el año pasado, a un oficial, dos suboficiales y tres agentes de haberlo abusado y golpeado. En principio, los efectivos fueron detenidos por la denuncia del detenido, por orden del fiscal especial penal de Derechos Humanos, Daniel Turraca, pero luego fueron liberados por la Jueza de Garantías María de las Mercedes Pereyra, ya que los exámenes médicos concluyeron en que no hubo ningún tipo de abuso sexual.
Tras el hecho, fue alojado en el Centro de Detención Transitorio de Barranqueras mediante habeas corpus presentado ante el juez de Ejecución Penal, Jorge Raúl Lataza Gandini. Luego de varios días, trasladaron al homicida a la comisaría ubicada en Villa San Martín, donde atacó a personal y una mujer policía resultó herida.
Ante ello, nuevamente lo trasladan. Esta vez a la Isla del Cerrito. Allí otra vez protagonizó otro hecho de violencia contra custodios, y amenazaba con matarse y matar a sus compañeros.
A las pocas horas fue llevado a la Comisaría Octava, allí atacó a su propia madre y la acusó de que “ella fue quien lo mandó a matar a su padre”, intentó agredirla. El juez de ejecución penal Nº1, a cargo de la causa, finalmente le quitó las salidas transitorias por su pésima conducta.
Luego, fue trasladado a la Comisaría Primera de Resistencia, donde otra vez protagonizó incidentes, lo que colmó la paciencia del Juez de Ejecución Penal, quien avanzó en la solicitud de un cupo en la Unidad Penal Federal U7, donde actualmente se encuentra alojado.
